Las luchas y marchas alrededor del mundo por la legalización de la interrupción de embarazo son cada vez mas. En esta ocasión Argentina se tiño de verde sus calles, al marchar para poder obtener el derecho a decidir.
Con 121 votos a favor y 117 votos en contra, mas otras 6 abstenciones, se escucharon los aplausos caóticos por parte de cada mujer detrás de este proyecto.
Un gran avance a diferencia de hace 2 años, cuando se fallaba en lo esperado, pero hoy cambio la historia, aun así falta al mayor obstáculo que es que el Senado apruebe y de la ultima palabra.
El día 10 de diciembre fue la fecha elegida, día internacional de los derechos humanos, para empezar a debatir en una sesión polarizada a las 11 de la mañana, mientras la sesión ocurría a través de pantallas gigantes en una plaza.
La norma que se discutía por la Cámara de Diputados regula que la interrupción de embarazo es libre hasta la semana 14 de gestación, con un plazo de 10 dias desde que se solicita el servicio de interrupción hasta que se lleve a acabo.

Diputado Juan Carlos Alderete declara: “Nadie promueve el aborto, las mujeres no quieren llegar a esa situación, mucho menos se usa el aborto como método anticonceptivo. Pero los abortos, por múltiples razones suceden. Resolver este tema en favor de las mujeres del pueblo implica que todas tengan acceso a un aborto seguro, es un problema de salud pública y justicia social”.
Desde el año 1921 en Argentina la interrupción de embarazo es un delito que se pena hasta con 4 años de carcel, exceptuando los casos de violación o que haya riesgo en la vida de la madre.
Se registran cerca de 372,000 abortos en mujeres argentinas que terminan en hospitalizaciones por complicaciones por mala praxis de lugares no legales.