¿Sabes como explorarte ?

La autorevisión en los pechos consiste en observar y detectar mediante el tacto, alguna anomalía en los senos. Es recomendable realizársela a partir de los 20 años, en ambos senos una vez por mes, una semana después de terminarse la menstruación, y si se esta embarazada o ya no hay regla, se puede hacer un día determinado por mes. En etapa de lactancia, es mejor hacerlo cuando el pecho no tiene leche. Es recomendable ir con el doctor anualmente para una revisión mamaria médica. Desde la edad de cuarenta, se recomienda hacerse una mastografía, periódicamente cada 2 años o cada que el ginecólogo diga, de acuerdo al historial clínico.

Observación

Enfrente del espejo estirando lo brazos hacia los lados, mira tus senos, ve que tus pezones apunten hacia la misma dirección. Pon las manos en la nuca e inclina ligeramente  los codos para enfrente identifica si hay ulceraciones, inchazones, hundimientos, si un pezón tiene secreciones o piel enrojecida.

Tócate enfrente del espejo

Tócate y reconoce tu piel, trata de detectar si tienes algo así como bolitas, dolor en alguna parte, si tienes un bulto raro. En tu nuca pon una mano y con la otra inspecciona el otro pecho. Has movimientos en forma de espiral empezando desde el pezón hacia afuera, usando las yemas de los dedos índice, mayor y anular. También muévelos en zig-zag de arriba para abajo y de lado a lado por toda la mama. Esto se hace desde la axila, porque hay casos en que aparece un tumor que nace en esta parte específicamente. Aprieta con suavidad el pezón usando las yemas de los dedos para ver si sale algún líquido fuera de l normal. Todo esto se hace en ambos senos.

Tócate estando acostada.

recostada sobre la cama boca arriba, pon una almohada bajo tu espalda, cerciórate que quede de lado del seno que vas a revisar y la mano que está en ese mismo lado del cuerpo, ponla debajo de la nuca. Usando tu mano libre recorre el pecho de la misma manera que en la revisión anterior, No dejes de revisar la axila y aprieta el pezón buscando algún líquido.

 Lo ideal es no encontrar ninguna anomalía, en caso de encontrar: una bolita, si se notan cambios de color en la piel de los senos. si  cambia la forma o posición del pezón. si la textura de la piel es diferente (si notas que se ve como piel de naranja, si hay llagas, úlceras o hay recequedad). si tienes hinchazón, te duele o notas cambios entre un seno y otro. si sale sangre o algún líquido extraño por los pezones.

si llegas a encontrar alguna anomalía, ve con tu doctor para que te atienda lo mas pronto posible. si tienes antecedentes familiares de cáncer de mama acude directamente con un especialista (oncólogo)

Visitar al ginecólogo para tu revisión clínica de rutina, así como también el adquirir el estilo de vida que consiste en hacer ejercicio y practicar algún deporte, es demostrar que te quieres a ti misma.